Hablar bien de las etiquetas en un mundo lleno de prejuicios y estereotipos como el nuestro puede parecer poco correcto o deseable en un principio. Sin embargo, y a pesar de su mala prensa, las etiquetas son necesarias porque así es como funciona nuestro sistema cognitivo para conocer y comprender el mundo que nos rodea. Tienen, no obstante, un lado indeseable cuando se aplican a las personas, y son los estereotipos negativos, pero dado que no podemos huir ni prescindir de las etiquetas, quizá deberíamos esforzarnos en etiquetar mejor siguiendo criterios adecuados y provechosos.
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